Este fast food gourmet se sitúa en un local esquinero del Ensanche de Barcelona, un espacio de doble altura con una gran fachada que da visibilidad de todo el interior del local desde la calle. El nuevo concepto del restaurante Butifarras gourmet, cocinadas a las brasas del horno de leña pretende transmitir calidad y tradición con un tono desenfadado y familiar que lo sitúe en un rango de restaurante económico, de comida rápida y para llevar. Por ese motivo se diseña una cocina abierta que se ubica en la fachada principal, mostrando en todo momento la materia prima y su proceso de preparación enfatizando la calidad del producto. En la planta baja, justo en la entrada y limitando la cocina, se sitúa la barra de pedidos. Ésta se entiende como una gran pieza maciza de baldosas que fueron diseñadas especialmente para éste proyecto. Éstas baldosas hacen referencia a tradición catalana, su formato y dibujo es el que se se empleaba tradicionalmente en las cocinas de las masías, pero a la vez se reinventa al sustituir el color original por un color marrón para reforzar la identidad del restaurante y enfatizar el vínculo de la butifarra con la tierra. La misma pieza cerámica se extiende a la trasbarra y sube al segundo piso a través de una columna, generando así una coherencia formal. El otro material principal es el hierro en acabado natural. Las grandes escaleras elaboradas en plancha de hierro son un elemento distintivo que nos remiten al proceso de cocción de las butifarras y a la vez, este material permite diseñar una escalera liviana que libera espacio un local de dimensiones reducidas. En la planta baja el mismo hierro se emplea como revestimiento, en forma de arrimadero, de trasbarra y barra. Los otros materiales que se combinan son el hormigón y la madera natural. Ambos materiales crudos y robustos acaban de generar la identidad del local, un local que nos transporte al interior de las brasas de la masía catalana. Por último, para compensar la robustez y densidad de los materiales empleados se diseñan unas lámparas colgantes que se sitúan en el doble espacio del hueco de escalera, éstas, inspiradas en la forma de la butifarra, dan al espacio un toque fantasioso y onírico. 

Equipo: Helena Puig Mompió Patricia Sirvent Collado Cristina Sobrado Romero Fotografías José Hevia