Se han iniciado las obras de ampliación de Bodegas La Horra, en la Ribera del Duero burgalesa. Integrada entre lomas coronadas por pinos, mejoranas, cantuesos y jaras, la nueva bodega semienterrada con sistema de ventilación pasivo y alta eficiencia energética aprovecha la geotermia, mientras se derrama al sur con largos estratos, rampas y miradores, destinados a su vez a la producción y crianza en barrica de los vinos, oficinas y zona de venta directa. Las naves existentes servirán como centro logístico, para realizar el etiquetado y almacenaje.

La nueva construcción está definida por un plano curvo de hormigón, dispuesto a modo de cubierta, cuya sección permite albergar vegetación como continuación del paisaje agreste del entorno. El proyecto contiene dos tipos de chimeneas de ventilación o zarceras, que se cierran o abren mediante compuertas para regular la ventilación, la renovación del aire o el secado, en cada etapa del proceso de elaboración del vino. En los espacios interiores se combinan el hormigón visto mediante encofrado con cañizo con carpintería y revestimientos con viroc, panel de virutas de madera y cemento coloreado en masa. La finalización de las obras está prevista en 2025.