The new ÓPALO boutique space focuses on returning the prominence to the product by creating a boutique where personalized treatment is one of its hallmarks.

Ópalo has been around for 10 years but they wanted a change of location. The new premises had elements that we wanted to maintain such as the mirrors on the wall that we wanted to maintain as they gave character to the space, at the same time they helped to expand it and create visual verticality. The rhythm generated by these mirrors in the shape of a half circle in the upper part, encouraged us to work with a similar shape - the hollow of the storage area - making this arch one of the figurative elements of the interior space.

The new space was smaller than the one they had been in previously, so we worked with different heights on the walls to be able to show as much product as possible in an orderly manner.

The different nuances of space are enhanced with the different materials used. On the one hand we have the painting of the pink wall, which zonifies zones the counter space and transmits us femininity and delicacy. On the other hand the floor of large grey tiles give us this feeling of spaciousness; also the curtain of the warehouse has the same grey tone so floor and wall seem to merge. As single elements we can see three stools in velvet grey with golden base so they can work as a group or as single seats. A wooden custom made cabinet was placed in front of the mirror but without completely covering it so it´s integrated into the space. The lower, golden module serves as storage while the back and shelves are white so they can create different compositions with their products. On the other side, we use several shelves in white, the same color as the wall, to show off their products and create a changing exhibition area depending on the season.

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Una boutique fresca y delicada

La nueva imagen para la zapatería Ópalo, se centra en devolver el protagonismo al producto creando una boutique donde el trato personalizado es una de sus marcas de identidad.​

En este caso, se trata de un cambio de local. El nuevo local, contaba con elementos como los espejos de la pared que quisimos mantener ya que daban carácter al espacio, a la vez que ayudaban a ampliarlo y a crear verticalidad visual. El ritmo que generaban estos espejos con forma de media circunferencia en su parte superior, nos marcó para realizar con una forma similar, el hueco de la zona de almacén haciendo de este arco uno de los elementos figurativos del espacio.

El nuevo local es más reducido que el que tenían anteriormente, por lo que trabajamos en alturas en las paredes para poder mostrar la mayor cantidad de producto posible de una manera ordenada.

Se potencian los diferentes matices del espacio con los diferentes materiales utilizados. Por un lado tenemos la pintura de la pared rosa, que zonifica el espacio de mostrador y nos transmite feminidad y delicadeza. Por otro lado el gris del suelo en gran formato para dar esta sensación de amplitud; la cortina del almacén es del mismo tono para que suelo y pared parezcan fusionarse. También en gris terciopelo con base dorada, colocamos tres taburetes que se funden con el suelo. Se realizó un mueble de carpintería colocado delante del espejo pero sin taparlo totalmente para que fuera integrado en el espacio. El módulo bajo en dorado, sirve de almacenaje mientras que la trasera y los estantes están en blanco creando diferentes composiciones en el espacio. Al otro lado, utilizamos estantes repetidos en blanco, del mismo color que la pared, para potenciar el producto que se muestra y crear una zona de exposición cambiante en función de la temporada.